CONTROLAR EL ENOJO… TAREA DE VIDA (Parte II)
Psic. Margarita Sofía Guerra Paredes.
«Cuando estamos enojados, nuestra primera reacción suele ser equivocada.» Rick Warren.
Si tu hijo convive con una persona molesta de forma sistemáticamente es muy probable que aprenda a vivir enojado y a fastidiarse fácilmente.
MANTENER LA PERSPECTIVA Y CONTROLAR LOS PENSAMIENTOS
Frente a diferentes situaciones, siempre tenemos opciones, a veces las vemos, a veces no. El punto es que la decisión que tomemos nos generará otra serie de situaciones que terminarán ayudando a la situación o complicándola más. Te pido que imagines la siguiente escena:
“Tu hijo derrama la leche en la mañana… el tiempo está encima y en cuanto ves la leche derramarse piensas: Tendré que cambiarlo de ropa, y secar lo derramado, tal vez no lo dejen entrar a la escuela y yo llegaré tarde al trabajo”… Con esta fotografía es difícil no explotar en cólera. El punto es que todo esto es muy probable que pase, la pregunta es: ¿Quieres que pase en medio del llanto de tu hijo y tu ira fuera de control? O ¿Deseas que pase en medio del control y resolviendo todo en su momento?… la aspiración es que esta situación no te saque de control, es decir que no te lleve a gritar, regañar, golpear y/o sacudir a tu hij@, pues te puede generar situaciones que te complicarán más (el llanto de tu hij@ asustado por tus gritos y tu sacudida y/o regaño, que le generará no querer ir a la escuela o pedirte que no lo dejes llorando, etc., y puedes agregarle que en el proceso te tropieces y te lastimes, etc, es decir… si explotas hay más posibilidades de que te dañes y/o dañes a tu hij@. Todo lo que imaginaste en el primer momento sucederá si explotas o si te controlas. Es tu decisión… como deseas que suceda? y como resolverás lo que venga.
Parece muy difícil, y si lo es… pero no es imposible, es un proceso largo, que implica dejar la “costumbre” de explotar, y cada vez será menos, pero necesitas empezar en algún momento.
«Todo lo que se inicia con cólera termina en vergüenza». Benjamin Franklin
TE PUEDE AYUDAR:
PENSAR:
Generar una o más frases que te ayuden a poner en perspectiva lo
sucedido…”estoy enfadada y puedo controlarme… los accidentes ocurren… Me toca enseñarle a controlarse en momentos difíciles… Yo soy el adulto en esta situación… Me molesta la situación, no mi hij@.
DECIR:
– Ups… se te cayo… entre los dos limpiamos. (Te ayudará a hacer equipo y quitar culpas)
– Estas bien? (te recordará que lo importante es tu hij@)
– Es un accidente, se puede resolver.
Es obvio que no es tan fácil como lo estás leyendo, es un trabajo interno de muchos meses (en mi caso, han sido años), yo le llamo tarea de vida, tu automático es explotar, así lo aprendiste, (lo viste y lo viviste) tu tarea es generar una forma diferente de actuar y esto se logra solo con la constancia en el hacer.
Acompaña estas frases y pensamientos con RESPIRACIÓN… recuerda que la respiración lleva oxígeno a tu cerebro y te ayuda a pensar, si no piensas reaccionas, sino respiras das rienda suelta a lo que “tienes ganas” de gritar y golpear por toda la frustración de que tus planes se hicieron pedazos.
Si logras controlar tus explosiones en situaciones “pequeñas” como derramar líquidos, ensuciarse la ropa antes de salir, pedir ir al baño cuando estabas cerrando la puerta para salir… verlo@ semidesnud@ cuando estas por llegar a algún lugar, etc. podrás controlar explosiones por razones de más peso.
REGÁLATE UN MOMENTO para tranquilizarte… Detén la inercia de la reacción, si te regalas treinta segundos para respirar y procurar ver menos grave lo que paso, es probable que te ayude a no explotar.
Cuando nos demos cuenta de que podemos controlar nuestros sentimientos más fácilmente de lo que tu hijo controla su conducta, entonces serás capaz de sobrevivir a esta y otras etapas de la infancia y de la vida en general.