¿COMO ELEGISTE A TU PRINCIPE AZUL?

¿COMO ELEGISTE A TU PRINCIPE AZUL?
Mtra. Danitza Aidé Covarrubias Treviño

Querías elegir a tu principe azul, y resultó que…
¿Elegiste una pareja violenta?
Es posible que lo hayas hecho por lealtad.
A veces elegimos para formar nuestro hogar personas que nos violentan o dañan por amor.

Descubre porqué.

Es una realidad que existe la violencia en nuestro país. Y en el mundo. No sòlo en las calles, también en los hogares.
De acuerdo al sentido común podríamos pensar que si las personas han tenido experiencias de maltrato en su hogar, deberían elegir una pareja que las alejara completamente de la posibilidad de revivir esa experiencia ¿no es cierto?

Pues dèjame que te diga que -sorprendentemente- esto no es así…

Cuando venimos de una historia así, solemos rechazar a nuestro padre o madre por esa manera violenta de tratarnos. Más, como venimos de ellos precisamente, les somos, (sin saber), profundamente leales. Es entonces, en una lealtad inconsciente que les amamos tanto que escogemos una pareja violenta para seguir amándole, e incluso para buscar una solución a aquella historia.

Es ahí, desde nuestra historia, desde nuestros dolores infantiles, que muchas veces elegimos y nos relacionamos con nuestra pareja. Sucede con frecuencia que le cobramos la factura a nuestra pareja de nuestra historia con papá y mamá, y así podemos nosotros ser violentos, incluso sin darnos cuenta. Podemos también ser violentos y accionar la manera violenta de nuestra pareja.

De la misma manera, podemos explicar que elegimos a nuestra pareja porque atraemos lo que necesitamos resolver… elegimos desde el inconsciente, es como en la atracción física, hay de igual manera una atracción de almas que se buscan para sanarse, para ser maestros el uno del otro. Para recordarnos aquella historia -que seguro quedó en el «olvido»- para poder trabajar y sanarla desde lo profundo.

Cuando nos quedamos ahí, en una relación tóxica, la pregunta es:

¿A dónde miramos?… ¿A dónde se mira con amor para quedarse ahí? lo más seguro es que mire a alguien de su sistema familiar, desde un amor ciego.

Y desde ahí, sería necesario asumir nuestra responsabilidad de haber elegido a una pareja, sin sanar aquello, sin resolver nuestra historia.

¿Qué hacer?
Comienza a recordar la historia, comienza a hacer las conexiones con tu historia actual, con tu pareja actual. Comienza a mirar el dolor de la niña/el niño que sigue expresándose a través de este ser adulto, y reclama en su pareja todos aquellos reclamos a papá y mamá. Ahí comienza el camino, más es solo el inicio. Hay mucho más que andar y trabajar.

«El amor del espíritu es una actitud. Acepta todo tal cual es, simplemente porque existe.»
Bert Hellinger.

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s