APRENDIENDO A SER HIJOS.

Una de las grandes preguntas que nos hacemos las madres, y quiero pensar que también los padres, es:

¿QUÉ PODEMOSMOS HACER PARA SER MEJORES PADRES/MADRES?

La respuesta es sencilla: ser mejores hijos.
Si sabemos ser hijos, sabremos también ser padres.
¿Y cómo podemos aprender a ser hijos?

He aquí el principio básico:

Somos mejores hijos si tomamos a nuestros padres tal y como son, y tomamos de nuestros padres tal y como pueden darnos. Abrazar y tomarlo todo, así tal como fue, así tal como son. Y decir… SÍ, GRACIAS! Finalmente nos han dado lo que nadie nos pudo dar:.. la vida. Aunque en estricto sentido, no nos la dieron, nos la pasaron, y con ello todo lo que son, todos sus talentos, sus recursos, sus conocimientos, sus sentimientos, sus raíces, y nos dieron todo lo que pudieron, lo mejor que pudieron, con su historia, con sus propias deficiencias, lo hicieron con amor, y por amor. Y con eso, nos dieron lo mejor..: la oportunidad. La oportunidad de estar en la vida, y al servicio de ella, y de pasar la vida… y así vemos a nuestros hijos, y podemos decirles te doy lo mejor que puedo, como puedo, soy esta que soy, -este que soy-, y aquí estoy. Y podremos enseñarles a nuestros hijos el camino de tomarnos como padres, así tal y como somos, y tomar lo que les damos, así como podemos, con amor y con agradecimiento, así tal y como nos miran hacerlo con nuestros propios padres…
Este es el camino.

Quieres ser mejor madre/padre?

Sé un mejor hijo/hija. Ve y abraza a tus padres. Tómalos. Agradéceles la vida, y todo lo que en ella vino para ti. Aprende a tomar de ellos el amor que te dan, como pueden, aprende a abrazar la vida, disfrutarla, acrecentarla, y poder mirar en los hijos cómo la vida florece.

«Ante la realidad no hay elección.»
Bert Hellinger.