Psic. Margarita S. Guerra Paredes.
La tarea de los padres consiste en quitarles «lo niños» a nuestros hijos para convertirlos en adultos responsables, honestos, trabajadores y FELICES.
Pero para que logren ser felices es importante que NO dejen de ser niños. (Aquí debería poner un emoticón con cara de ???)
Pensar en “domesticar” (así dice Joan Manuel Serrat en su canción Esos locos bajitos) a los hijos es una tarea muy complicada y si le agregamos que también tenemos que enseñarles a no olvidarse de ser niños se convierte en un sin sentido.
La buena noticia es que los adultos no tenemos que enseñarlos a ser niños, solo necesitamos tener claridad acerca de cuándo permitirles ser niños y LO MAS IMPORTANTE… cuándo PERMITIRNOS ser niños junto a ellos o sin ellos, pues ésta es la manera en que les enseñaremos que los adultos no somos adultos todo el tiempo.
Una manera de asegurarnos de que no nos vamos a convertir en ogros, es cuando nos convertirnos en niños y disfrutamos de un helado, de unas cosquillas, de ensuciarnos, de mojarnos, de jugar (no llevarlos a jugar) de decir en idioma “chubidu” cosas que solo tienen diferente entonación y son un conjunto de sonidos raros… en fin, permitirnos hacer locuras que no son deberes, ni responsabilidades, que solo son ocurrencias.
Ya casi es día del niño, festejemos nuestra infancia, desempolvemos nuestra capacidad de sorprendernos, de crear, de ser ocurrentes y divertirnos.
FELIZ DÍA DEL NIÑO!!!